jueves, 28 de febrero de 2013

28/02 LOS INNOMBRABLES



Paradojas de la Vida, cuantos más esfuerzos se llevan a cabo para soslayar un hecho, más evidente acaba resultándonos.

 En una suerte de infernal Ley de Murphy, esta semana no ha hecho si no poner brutalmente de relieve todo lo que, con ahínco, se ha procurado obviar por todos los medios.

En esta particular carrera de quién esconde más, la secretaria general del PP ha logrado una mención especial por eso del “pago en diferido” que nadie ha logrado descifrar pero que todos hemos comprendido. La intervención de una Cospedal librada a los leones, cuyas palabras desprendieron un inequívoco tufo a miedo y a deudas pendientes, fue lo suficientemente enrevesada para que todos entendiésemos que, hasta hace muy poquito, Bárcenas fue, en el seno del partido que lideraba Aznar, mucho más que un simple contable. Tampoco se le escapa a nadie que sus cuentas, muchas veces  millonarias (de euros, claro), huelen a lo que huelen… procuren no pisarla.

Pisar fuerte es que lo se intenta desde Zarzuela, también haciendo malabares para no nombrar a nadie, en un particular “Annus Horribilis” que no está dejando noble con corona, y nosotros que creíamos que estas cosas sólo le pasaban a la  britana prima Isabel. La extraña alianza del mal llamado sindicato Manos limpias (cuyo único dirigente es un conocido militante ultraderechista, ex responsable de la organización Frente Nacional y nombrado Caballero de Honor de la Fundación Nacional Francisco Franco, casi nada) y la izquierda denominada republicana, junto a la torpeza y codicia de algunos huéspedes de la Zarzuela, nos dibuja un panorama en el que la salida de los Borbones sería la solución a todas las crisis, como si un Plan tipo Sarkozy fuese la solución...y va a ser que no. Manipulaciones las mínimas y chorizos entre rejas, la solución es así de simple.

Simple es la ecuación: si lo que nos ofrecéis no convence, ¿por qué os lleváis las manos a la cabeza cuando se producen fenómenos como el de Italia? García Margallo, nuestro ilustrado ministro de Exteriores, ha venido a decir que si bien era cierto que los partidos no eran capaces de conectar con los ciudadanos, optar por otras soluciones aventureras no era de recibo. No se puede estar provocando la catástrofe, llorar después a los muertos y tomarnos finalmente por gilipollas… ¿O sí? Visto lo visto, va a ser que sí…
Elvita, que cuando se pone el cachirulo no hay quien la pare, afirma, con su particular aplomo: “si todos fuesen tan limpicos como dicen ir, no habría necesidad ni de ir tapando mierdas, ni esconder nombres de sinvergüenzas”.

Más claro, Vitriolo.

 ¿Vitriolo? A mares nos va haciendo falta…pero ya!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario